Supongo que seguí aguantando el tipo (aunque ya no había mucho para aguantar). Como el capitán del Titanic preferí hundirme con él antes de tirar/me/te por la borda.
No defiendo mi decisión, pienso simplemente que creyendo ser valiente al luchar por nosotros en realidad estaba disfrazando mi cobardía, el miedo, la incertidumbre y el frío que me deparaban si me dejaba caer en las heladas aguas del Atlántico.
Pero mira,al final estoy aquí, congelada de frío y sujeta a una tabla esperando a que me rescaten o rescatándome yo sola (por si acaso) remando con manos y pies.
Azul frío... de momento.
(Algún día veré la aurora boreal,espero que entonces solo este helada por fuera)
La aurora boreal también es uno de mis sueños. No se si en Islandia o en Alaska, pero prometo verla algún día.
ResponderEliminarCuídate ese resfriado ;)))
Besazos congelados
El mundo sigue siendo hostil y frío...
ResponderEliminarSaludos y feliz sábado.