martes, 24 de mayo de 2011

Con-ge-la-da

Supongo que seguí aguantando el tipo (aunque ya no había mucho para aguantar). Como el capitán del Titanic preferí hundirme con él antes de tirar/me/te por la borda.
No defiendo mi decisión, pienso simplemente que creyendo ser valiente al luchar por nosotros en realidad estaba disfrazando mi cobardía, el miedo, la incertidumbre y el frío que me deparaban si me dejaba caer en las heladas aguas del Atlántico.
Pero mira,al final estoy aquí, congelada de frío y sujeta a una tabla esperando a que me rescaten o rescatándome yo sola (por si acaso) remando con manos y pies.

Azul frío... de momento.

(Algún día veré la aurora boreal,espero que entonces solo este helada por fuera)

2 comentarios:

  1. La aurora boreal también es uno de mis sueños. No se si en Islandia o en Alaska, pero prometo verla algún día.

    Cuídate ese resfriado ;)))

    Besazos congelados

    ResponderEliminar
  2. El mundo sigue siendo hostil y frío...

    Saludos y feliz sábado.

    ResponderEliminar